Hay dos momentos del año clave en los que muchas personas se plantean ponerse a dieta para adelgazar: después de los excesos de Navidad y justo antes del verano con la llamada operación bikini. Sea cuál sea el motivo, tomar la decisión de cambiar de hábitos y llevar una vida más saludable siempre es una buena idea siempre que no cometamos locuras.VER 6 FOTOSInés de la Fuente16/01/2021
A la hora de adelgazar, simplemente se trata de tener en cuenta que hay que quemar más calorías de las que se consumen. Es importante prestarles atención, sí, pero también hay que tener en cuenta su procedencia, y es que no es mejor tomarse un refresco ‘light’ sin calorías que un puñado de almendras, aunque éstas sí tengan calorías.
Por tanto, es muy recomendable seguir un estilo de vida saludable en el que se priorice el consumo de pescados, aves, carnes magras, legumbres, huevos y frutos secos, así como verduras, frutas y lácteos. Y, por supuesto, combinarlo con la práctica de ejercicio físico (se recomienda un mínimo de 150 minutos de ejercicio a la semana) con entrenamiento muscular de alta intensidad al menos dos días.
No hay que obsesionarse con perder peso a toda costa y matarnos de hambre (¡eso nunca!). Para hacerlo de manera saludable, los expertos no se cansan en incidir en que la pérdida de peso debería ser de entre medio y un kilo a la semana. Tampoco es recomendable recurrir a las dietas de moda que prometen pérdidas de peso milagrosas en tiempo récord. Lo mejor es siempre que recurras a un especialista que te paute un plan de alimentación adecuado a tus objetivos. Y recuerda: márcate objetivos realistas.
Si estás tratando de perder algunos kilos, seguramente te hayas topado con ciertos remedios en Internet que prometen ser la solución, como beber agua con limón en ayunas, hacer una dieta detox, saltarse comidas o eliminar los hidratos de carbono de tu dieta (a no ser que sean carbohidratos simples como galletas, que en este caso sí es preferible no tomarlos). Muchos de ellos pueden ser realmente peligrosos para tu salud a largo plazo. Te contamos, con evidencias científicas, por qué no deberías hacerles caso. ¡Toma nota!
Hacer una dieta detox
Las dietas detox llevan años teniendo una gran presencia en Internet, pero son otro mito sin fundamento. La creencia de que debemos depurar el cuerpo de ciertas toxinas que ingerimos a través de los alimentos no tiene ningún respaldo científico. Ese tipo de dietas suelen basarse en la ingesta de ciertos zumos o batidos de frutas que supuestamente ‘limpian’ el organismo. Sin embargo, nuestro organismo ya realiza este proceso de manera natural gracias a los riñones y el hígado, por lo que seguir una dieta así no tiene realmente mucho sentido.
Dietas de un solo alimento
Dieta de la piña, dieta de la alcachofa, la dieta del pomelo… estos planes de ‘alimentación’ son un rotundo no. ¿Que vamos a adelgazar si los seguimos? Puede ser, pero a un precio muy alto. Para empezar, no son saludables puesto que estamos dejando de consumir otros muchos nutrientes muy importantes para el organismo y además no crean adherencia. Lo importante es seguir un estilo de vida saludable con una dieta equilibrada en la que no tengamos carencias.
Tomar pastillas para adelgazar, batidos en polvo y demás
Las pastillas adelgazantes y este tipo de productos tan famosos en los últimos tiempos no son realmente necesarios para perder peso. Si bien es cierto que pueden resultar efectivos, no lo son por sí mismos, sino que este tipo de productos suelen estar acompañados de una reducción drástica en las calorías ingeridas, lo cual propicia la pérdida de peso. Lo importante en un plan de alimentación es la adherencia, es decir, la facilidad de mantenerlo en el tiempo y con este tipo de dietas esto no lo vamos a conseguir.
Saltarte comidas
No es necesario ni recomendable pasar hambre para adelgazar. Una de las creencias más extendidas entorno a la pérdida de peso es que si nos saltamos la cena vamos a favorecer la pérdida de peso. Sin embargo, si nos saltamos una comida es más que probable que lleguemos con mucha más hambre a la siguiente e ingiramos más calorías de lo normal. Si quieres perder peso, no dejes de cenar, pero sí apuesta por una cena ligera.
No tomar hidratos por la noche
Los hidratos de carbono no engordan más a determinada hora del día, por lo que no tiene mucho sentido dejar de consumirlos por la noche. Sin embargo, sí es importante seleccionar qué tipo de hidrato vamos a tomar, ya que no es lo mismo una tableta de chocolate repleta de azúcares simples, que unas almendras o una patata con hidratos más complejos.
Beber agua con limón en ayunas
Que beber agua con limón en ayunas adelgaza es probablemente una de las creencias más extendidas. Es cierto que tiene bastantes beneficios, como mantener la hidratación y fomentar a sensación de saciedad, pero estos mismos beneficios los conseguimos con el agua sin necesidad de añadirle el limón. Por tanto, no es algo milagroso ni tiene ningún efecto extra si lo tomamos a determinada hora del día. Si optamos por el agua con limón en lugar de otras bebidas calóricas como los refrescos, entonces sí es una buenísima alternativa.