Con la tercera Copa del Mundo en manos de Argentina, ya comenzó la cuenta regresiva para la siguiente edición que contará con un formato renovado y totalmente innovador por varias razones: es la primera vez que hay tres países organizadores, tendrá 16 sedes, no implicará la construcción de nuevos estadios y 48 serán las selecciones participantes.
Estados Unidos, México y Canadá serán los anfitriones, dando el paso inicial para un nuevo tipo de organización para disputar el torneo más importante del fútbol. Además, será la primera vez que se dispute con 16 nuevas plazas, subiendo a 48 la cantidad de clasificados.
Cubrir las distancias será un reto al igual que prepararse para recibir a los miles de turistas que viajarán a alentar a sus equipos, pero cada una de las 16 ciudades ya se está preparando para poder capitalizarlo y recibir a los hinchas que visiten sus tierras. Estados Unidos aportará a Atlanta, Boston, Dallas, Houston, Kansas City, Los Ángeles, Miami, Nueva York, Nueva Jersey, Philadelphia, Seattle y San Francisco; México tendrá tres ubicaciones: Guadalajara, Ciudad de México y Monterrey; mientras que Canadá ofrecerá como anfitriones a Toronto y Vancouver.
El sector turístico recibió con alegría la designación de las ciudades por el alto impacto económico que supone para la industria. Muchas de ellas hace muchos años que vienen luchando por ser casa de alguno de los partidos por lo que significa para los hoteles, restaurantes, tiendas, mercados y servicios.
Además, será una oportunidad única para que los viajeros disfruten no solo de los partidos de su Selección Nacional, sino también de los atractivos que incluyen las localizaciones como por ejemplo los barrios antiguos de San Francisco, las playas de Miami y los acuarios de Canadá.
