A pocas horas del inicio de la edición 91° de los premios Oscar en el Dolby Theatre, un repaso por algunos de los discursos más potentes de galas anteriores que quedaron en el recuerdo de los televidentes. Actrices como Frances McDormand, Lupita Nyong’o o Cate Blanchett decidieron usar sus pocos segundos sobre el escenario para enviar un mensaje sobre igualdad y empoderamiento en la industria del cine. Pero otros también usaron ese momento único para hablar de inclusión y dar esperanza a los más jóvenes.
Lupita Nyong’o (2014)
La nominada por primera vez, Lupita Nyong’o, ganó como mejor actriz de reparto por 12 años de esclavitud en la ceremonia de los Oscar de 2014. Después del habitual agradecimiento, familia, amigos y maestros, la intérprete keniana nacida en México terminó con mensaje de aliento para los más pequeños: «Cuando miro a esta estatua dorada me acuerdo de todos los niños. No importa de dónde sean sus sueños son válidos».
Michael Giacchino (2010)
No siempre son los grandes nombres los que tienen los mejores discursos. En 2010, el prolífico compositor Michael Giacchino ganó su primer Oscar por la película animada Up de los estudios Pixar. «Nunca en mi vida mis padres me dijeron: ‘Lo que estás haciendo es una pérdida de tiempo’. Nunca. Crecí. Tuve maestros, tuve colegas y personas con las que trabajé en mi vida que nunca me dijeron que lo que estaba haciendo era una perdida de tiempo. Sé que hay chicos que no tienen ese apoyo. Sí está ahí afuera y me estás escuchando. Si quieren ser creativos, háganlo. No es una pérdida de tiempo».
Graham Moore (2015)
Graham Moore, el guionista que ganó el Oscar como mejor guión para The Imitation Game, tomó el podio e hizo un sincero descargo, que se convirtió en un mensaje de esperanza y amor: «Cuando tenía 16 años, traté de suicidarme. Me sentía raro y diferente. Sentía que no pertenecía. Y ahora estoy aquí, y me gustaría decirle a esos niños o niñas que se sienten raros. Mantente raro, mantente diferente. Y luego, cuando sea tu turno y estés de pie en el escenario, transmite el mismo mensaje a la siguiente persona que venga».
Frances McDormand (2018)
En un año con una discusión sobre política de género en Hollywood y los casos de acosos sexual en la industria que generó el movimiento #MeToo, Frances McDormand ofreció un contundente discurso sobre tras ganar como mejor actriz por Tres anuncios por un crimen.
«Miren a su alrededor, damas y caballeros, porque todas tenemos historias que contar y proyectos que necesitamos financiar, invítanos a su oficina en un par de días, o puede venir a la nuestra, lo que más le convenga, y le contaremos todo. Y por último tengo dos palabras para decir está noche: ‘inclusion rider'», expresó McDormand generando una gran ovación.
Inclusion rider, un término que muchos desconocían. Es una cláusula que obliga a la diversidad racial y la igualdad de género en el sector audiovisual. La pueden reclamar los propios artistas en forma de cláusula aplicable a sus contratos y exige al menos un 50% de mujeres, un 40% de diversidad de grupos étnicos, un 20% de personas con discapacidad y un 5% de personas LGTB tanto en el casting como en el equipo de rodaje.
Cate Blanchett (2014)
Cate Blanchett ganó el premio a mejor actriz para Blue Jasmine en el año 2014. Para terminar su discurso de aceptación, Blanchett envió un concretó mensaje a la industria cinematográfica de Hollywood: «Muchas gracias Woody (Allen) por elegirme. Realmente aprecio mucho que lo hayas hecho. Estoy muy orgullosa de que Blue Jasmine haya estado en los cines tanto tiempo como estuvo», comenzó diciendo y remató: «También quiero agradecerle a la audiencia por haber ido a ver la película pese a que exista gente en la industria cinematográfica que tontamente adhiriere a la idea de que las películas protagonizadas por mujeres son experiencias de nicho. Que no lo son. La gente quiere verlas, de hecho, ganan dinero. ¡El mundo es redondo gente!».
De este manera, Blanchett se animó a hacer frente a la creencia de Hollywood que sostiene que las películas protagonizadas con mujeres no dejan ganancias económicas y que su recaudación es mucho menor que aquellas protagonizadas por el sexo masculino.
