Por Leonardo Medrano
Desde hace muchos años escucho una canción que tiene como título, cuando un amigo se va, para mí era indiferente, hasta llegar tu partida Frank Cabrera, en el día de ayer de manera sorpresiva para nosotros, ya que no llamo nuestro amigo Edgar Lantigua y me informa que Frank está en una Iglesia y que le había dado un infarto y que lo estaban tratando de reanimar, no permití que me terminara de contar, me turbe, me puse en blanco, le dije a Katherine cámbiate que tenemos que ir por Frank, en el camino Katherine me dice párate, respira está muy turbado, cuando llegue a la Iglesia ubicada en Torre Alta, entre rápido y allí en un pequeño cuarto de la Iglesia yacía mi amigo, mi hermano Frank Cabrera, cuanta impotencia sentí, no lo creía aun viéndolo, llore como un niño a su lado, no podía creer lo que pasaba, alguien decía que esperábamos al Médico Legista que nunca llego a pesar del tiempo que esperamos, otro médico que ocupo el cargo años anteriores reviso su cuerpo vía llamada al legista notifico su estado, UN INFARTO FULMINANTE, hasta que fue llevado a sus horas fúnebres en la calle 12 de Julio.
Cuando un amigo se va queda un espacio vacío, que no lo puede llenar la llegada de otro amigo. Cuando un amigo se va, queda un tizón encendido que no se puede apagar ni con las aguas de un río. Ahora entiendo el tema después de tu partida amigo Frank, porque deja un vacío en mi imposible de sustituir, todos los que te conocimos, sufrimos por tu partida, este día 17 de Noviembre 2019 es de los más tristes de nuestra vida, es difícil definir, lamento no poder estar contigo en este momento en que el señor te llamo a su morada, pero a la vez estoy conforme con tu partida, ya que tuviste tiempo de limpiar tu alma, de vivir una experiencia espiritual y de agradecer a Dios, por tu familia y tus amigos, tuviste tiempo de confesión y tuviste el privilegio de expresar palabras de la Santa Biblia, Dios te bendiga hermano mío.
El miércoles pasado estuviste en mi casa, me esperaba porque yo no estaba, como siempre feliz, con una sonrisa donde me pediste recapacitar en dos temas que espero cumplirte en honor a tu amistad, me solicitaste que me integre a la institución a la que pertenecemos ADOMPRETUR y que lo haga en honor a nuestra amistad, también me solicítate llamar a nuestro amigo en común, Roberto que reside en los Estados Unidos, ya que el mismo había sido intervenido quirujicamente y a él le daría mucho gusto mi llamada, Frank siempre preocupado por lo demás ese era el.
Hoy estoy triste no puedo ocultarlo, ese mismo día me dijo voy para un retiro espiritual el próximo viernes, estaré desconectado, así es que no me llame, yo como siempre le dije, eso no es así usted tiene que decirme donde va, ah y si te pasa algo a quien van a llamar, recuerda que soy la única familia aquí en Puerto Plata, sonrió y me dijo, que mi Tía no te escuche, sonreímos los dos, me dijo a mí me hace falta este momento, respecte su decisión no lo llame durante el fin de semana, cuando lo volví a ver ya había fallecido, ves con Dios querido AMIGO
Todos los que te conocíamos sabemos de tu enorme amor. Amor por tu familia, amor por los compañeros de trabajo a los que siempre tratabas de animar y ayudar en los momentos de dificultad, para que se sintieran parte del mejor equipo del mundo, un equipo formado por las mejores personas, siempre me hablaba de Ferreira, Melvin, Banaeimi, sus jefes inmediatos Julio Almonte y la señora Jakaira, todos sabemos de tu enorme amor por la naturaleza, amor a la comunicación en sentido general, gracias por todo lo enseñado y por todo el amor a mi familia que era también la tuya.
Una vez más se nos confirma que los humanos, no sabemos nada del misterio de la vida, del porqué Dios no evita que personas en plenitud, nos dejen en este rió de lágrimas, por qué suceden las injusticias como la de perder a un gran amigo que nos ha querido con todo su ser, por qué tan trágicamente se truncan las ilusiones del futuro.
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